AL OTRO LADO
Subir de nuevo a la
habitación era lo que quería hacer,
cuando una ráfaga de viento le llevó al lugar de donde salió hacía varias
décadas. Partió hacia ninguna parte, a donde solamente la necesidad y el hambre
llevan a quienes no pueden despojarse de ella. Alcanzó el desarraigo, los días
de fábrica y las noches de invierno; conoció la felicidad de sentirse triste.
Pintó su vida con paisajes de gris perla, de solares cochambrosos y calles sin
asfaltar. Se fue del mundo hacía días y desde aquí arriba vi cómo una ráfaga de viento
llevó su esencia hasta el lugar de donde salió hacía varias décadas.
Gaelia 2016
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